La mejor generación del baloncesto español, coronó con este bicampeonato europeo, camiseta de michael jordan un lustro de éxitos que comenzó con el Mundial 2006 de Japón. Como subcampeón en la Universiada de Fukuoka en 1995, el Equipo Nippon (como también se llama a los japoneses) tuvo una racha de éxitos y se clasificó para el Campeonato Mundial FIBA de 1998, su primera clasificación en más de 30 años. Ante la televisión, en diferentes momentos del partido, resultaba difícil no escuchar los gritos del mosqueado seleccionador, y sus declaraciones tras los partidos, incluso en la primera fase, evidenciaban su idea de que mucho habrían de mejorar sus pupilos si se quería llegar a la última semana del campeonato. Durant. «Va a ser un viaje difícil, pero estoy hecho para esto. Soy un baloncestista. Sé que mis hermanos (compañeros) pueden ganar el sexto partido, y estaré aplaudiendo con todo el «Club Nation» mientras lo consiguen».
Itoudis. Según la visión de los griegos, pronto «veremos a los entrenadores europeos integrarse en la NBA», señala Pistiolis, que cree que los entrenadores seguirán los pasos de los jugadores en lo que a la incorporación a la NBA se refiere «cuando era niño y veía la NBA, nadie pensaba que los jugadores europeos fueran importantes. Más tarde, algunos jugadores europeos comenzaron a convertirse en jugadores de rol y ganaron su lugar. Y luego comenzamos a ver a europeos que fueron verdaderos protagonistas. No sé cuándo será, ni en qué medida, pero es inevitable que esto mismo suceda con los entrenadores». Sé lo que hicisteis el último verano: ganar de forma magistral el Eurobasket en Alemania, pese a no estar en los pronósticos de nadie y conquistar, así, el cuarto oro continental en lo que va de siglo. Se cree que la selección compite por el oro olímpico desde que las retransmisiones eran en blanco y negro o el incansable Woody Allen filmaba sus primeras películas, pero lo cierto es que ya faltaron en Atlanta 1996. La racha de España, aun así, es mayúscula, con participaciones ininterrumpidas desde Sidney 2000, y con un gran bagaje en cuanto a las preseas cosechadas, pero lo cierto es que disputar este torneo es muy complicado, y los preolímpicos se pueden convertir en un infierno.
No fue así, pero Scariolo se ha ganado la decisión de seguir, y tendrá un gran reto en junio de 2024: clasificar a la selección para los JJ.OO. El de Brescia se ha ganado un crédito que, si no ilimitado, sí debería ser generoso. Es cierto que Bélgica era un rival demasiado potente para el rédito ganado en la fase inicial, pero la derrota fue dolorosa. Era uno de los metales que se esperaban, más aún con la gran fase de grupos que las españolas habían realizado, manteniéndose invictas. Todas en la pista sabían que era Emma Meesseman la que más peligro, calidad y puntos tenía entre su baloncesto, pero sería Kyara Linskens la que más dolores de cabeza daría a España. Méndez sin cesar. No tuvo respuesta en la pista. Han salido tan bien las cosas a la selección en lo que va de siglo que parece España disputa de forma puntual los Juegos Olímpicos desde hace eones -pese a la dificultad para clasificarse, pues solo juegan doce selecciones, y de diferentes continentes-, y sin necesidad de jugar un preolímpico. Pero en la presente canícula, esta vez sí, el torneo de España se ha convertido -al igual que el título de la película dirigida por Jim Gillespie-, en un slasher, una historia de terror que ha acabado de forma brusca, con una temprana eliminación que dejó a los de Sergio Scariolo sin avanzar a las rondas eliminatorias y con la necesidad de hacer los deberes en 2024 si se quiere estar en los Juegos Olímpicos de París.
El equipo femenino cae derrotado con claridad en cuartos de final y se despide de los Juegos Olímpicos. Rodríguez tira de memoria para evocar tiempos en que España estaba acostumbrada a torear en semejantes plazas: «¿Posibilidades para los Juegos? Uno -y aquí tiro de años-, que se crio en su juventud entre preolímpicos y que volverá a vivirlo, sabe que es una lotería. Hay que estar muy bien en el día D, ya que se disputa dos semanas después de haber finalizado una temporada durísima y vete a saber cómo estarán física y anímicamente los jugadores. Optimista soy, por supuesto, pero será complicado. Esa es la meta, llegar a los Juegos, pero luego hay que dar el callo. Los veranos, viniendo desde un preolímpico, son extraordinariamente largos», explica. Al igual que la NBA, el fútbol femenino también tiene medios tiempos y faltas, lo que puede alargar el juego. El periodista Shams Charania develó que las negociaciones entre la asociación de jugadores y Nike, que es el suministrador oficial de las camisetas NBA, están en marcha. Arias Maldonado, mientras que Andrea Blez recuerda todo lo que el técnico ha dado a la selección española, siempre capaz de sacar lo mejor de los jugadores en los torneos FIBA.
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